¿Prefiere que le suban 2.000 euros el sueldo o que la empresa le pague seguro médico, gimnasio, Netflix, dos entradas de cine al mes y 10 euros mensuales para donar a la asociación que elija?
La respuesta puede que le sorprenda, pero el 67,2% escogió lo segundo.
Es uno de los datos del informe Estado y tendencia de los beneficios, elaborado por la fintech Cobee, que recoge algunos de los cambios y tendencias que se están produciendo en las retribuciones flexibles.
Algunos expertos aseguran que solo es rentable para las rentas altas
Estamos ante un mercado que está evolucionando rápidamente y que se enfrenta a grandes retos. Borja Aranguren, CEO de Cobee, señala uno: “Los trabajadores exigen flexibilidad para decidir entre un amplio abanico de productos y en función de sus necesidades”. El objetivo es que puedan establecer un plan a la carta en el que quiten y pongan lo que quieran al momento.
Otro de los desafíos es dar cabida a los nuevos artículos demandados. Junto a los tradicionales seguro médico, guardería, comida o transporte, hay otros. “La movilidad compartida, plataformas de psicología o entrenamiento online, coaching o Spotify”, explica Aranguren.
Zurich Seguros aboga por ofrecer más productos y mayor capacidad de decisión
Hay más. Los cita Javier Fernández, profesor del Máster de Recursos Humanos de Icade Business School: “La empresa saludable y la formación de calidad”.
Las compañías mejoran estos planes con cambios para adaptarse a “una fuerza laboral cada vez más diversa y que demanda una mejor comunicación”, argumenta Fernando Palomares, director del área de retribución flexible de Willis Towers Watson España.
Schneider Electric apuesta por un salario emocional, la personalización y la tecnología
El director de recursos humanos de Zurich Seguros España, Santi Ínsula, afirma que “hemos ido ampliando la oferta”. Ahora hay que ofrecer “más productos y mayor capacidad de decisión”.
José Luis Cabezas, vicepresidente de recursos humanos de Schneider Electric Iberia, dice que apuestan por un modelo que define como “salario emocional”. Además, apunta a “la personalización y a la digitalización”.
La tecnología es la “palanca que faltaba para dar el salto definitivo”, declara Aranguren. Su startup ha desarrollado con ella una herramienta para que los trabajadores gestionen sus planes con una aplicación y una sola tarjeta.
Sus usuarios la valoran positivamente. “Te hace la vida más fácil y elimina cualquier barrera”, comenta Juan Cardelús. “Lo más atractivo es que veo lo que me estoy ahorrando en cada consumo”, añade Sara Escartín. Ambos son empleados de Cobee.
Para sueldos altos
Algunos expertos expresan sus dudas acerca de la rentabilidad de estos planes. Es más, aseguran que solo la alcanzan aquellos trabajadores que cuentan con sueldos elevados.
Daniel Patricio, profesor en el Máster de Recursos Humanos de ESIC, sostiene que “solo vale para rentas altas” y pone el límite a partir de los 40.000 euros. De ahí para abajo, manifiesta que “se come la renta vital de los empleados” y duda también de sus beneficios fiscales. “Se usa para empoderarlo y vincularlo emocionalmente”, pero “lo prioritario es incrementar los salarios”.
José Ramón Pin, profesor en IESE Business School, coincide en que “es interesante a cierto nivel de retribución, con sueldos de 50.000 o 60.000 euros al año”. Pero para el salario medio que hay en España, 23.000 euros, lo duda. “Aunque puede que le interese al trabajador desde el punto de vista fiscal si declara algo más en el IRPF”, concluye.